Descifrando el mapa de nuestra vida

Hacemos y aprendemos muchas cosas distintas a lo largo de la vida y a veces nos preguntamos qué sentido tienen esas búsquedas y qué deberíamos hacer con todo eso. Podemos verlo como un mapa con rutas, señales e indicaciones en el que buscamos algo valioso y esos conocimientos ayudarían a descifrar el mapa y llegar a nuestro destino incierto.

¿En qué somos mejores?

Parte del sentido de lo que hemos hecho hasta ahora es responder al interrogante ¿en qué somos mejores? ¿Qué nos hace únicos? Porque sin duda eso aumenta las probabilidades de poder entender el mapa de nuestra vida. Sentimos la necesidad consciente o inconsciente de ser los mejores en algo, también porque nos viene de nuestra familia y del contexto social el dejar una huella en otras personas.

Saber que destacas es fuente de autoestima pero por otro lado sabemos que pocos lograrán hacer un aporte original, la mayoría destacarán combinando cosas que ya existen aprovechando el bagaje adquirido de los trabajos, hobbies, éxitos, fracasos y sueños. Esos aportes van a ser siempre originales porque son el resultado de un recorrido único y por la entrega e intensidad que pusieron en él. Esa combinación lo hace irrepetible.

Ser original y saber combinar

Está sucediendo ahora que músicos jóvenes combinan una canción conocida con otras melodías y géneros creando algo nuevo. Todos hacemos eso de alguna manera, incluso Picasso no inventó de pronto el cubismo, empezó copiando a los grandes maestros hasta que encontró su expresión única. Hay una exigencia extrema de novedad en la sociedad que nos pesa mucho y debemos contrastarlo con lo que se hace hoy en muy distintos campos: ¿cómo se comportan los padres o madres? Seguramente se parece a algún modelo que tienen consciente o inconscientemente de cómo fueron criados. ¿Cómo son los líderes de equipos en las organizaciones o en las comunidades? ¿Cómo son los docentes?

Ser buenos coleccionistas

Vamos juntando nuevas pistas con todo lo que hacemos y es importante ser buenos coleccionistas de ellas para que estén adecuadamente disponibles cuando necesitemos combinarlas con los conocimientos y destrezas que ya tenemos: para armar algo, enfrentar un desafío, aprovechar una oportunidad, tomar una decisión.

Por otra parte, cada uno de esos hallazgos tienen un valor en sí mismo y podemos utilizarlos para enriquecer nuestra vida, por ejemplo, en lugar de hacer más cosas per se enfocarnos en hacer mejor lo que estamos haciendo ahora, aprovechando y disfrutando más cada momento.

Complejidad de la vida humana

Debemos estar atentos a descubrir que algunas pistas del mapa que pensábamos tenían un significado cobran otro diferente porque la vida es una realidad compleja, no se entiende solo racionalmente y hay sucesos imprevistos que nos pueden obligar a repensar todo lo que teníamos y eso en parte es bueno porque nos hace sentir que estamos pisando la realidad y creciendo.

Las metáforas -ese gran recurso de la poesía- son importantes para ayudarnos a entender. Es un artilugio literario para decir las cosas de forma más bella pero son más profundas, es una manera eficaz de comprender realidades complejas. Aprender a utilizarlas te ensancha la mente.

Brújula para el mapa de la vida

Finalmente, es necesaria una brújula que nos oriente para al mismo tiempo: respetar la realidad; respetarse a sí mismo; superar la ley de la selva; aprender a usar la brújula y el mapa; saber que el terreno está minado y hay que estar dispuesto a sufrir. En resumen: sostener un esfuerzo inteligente para lograr el equilibrio personal y social.

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Por: Vicencio González